Tal vez tal lo último en lo que piensan algunas PYMES al hablar de redes sociales es que se pueden usar de manera productiva. Cuando mucha gente piensa redes sociales, la idea automática es “pérdida de tiempo”. Facebook comúnmente es el lugar al que se va a jugar Farmville mientras que el jefe no está mirando. YouTube es donde te diriges cuando tienes cinco minutos de sobra y necesita un buen momento de risa por lo que ves el video Jackass unas cuantas veces más. Twitter es el lugar a donde acudes cuando quieres ponerte al día con los chismes más recientes de tu artista favorito.
¿Es posible que estos “obstáculos de la productividad” en realidad pueden hacerte ahorrar tiempo?
Guía de contenidos
Definitivamente SÍ, y en esta guía vamos a mostrarte 5 formas en las que las PYMES pueden usar las redes sociales de manera productiva que te facilitarán tu día a día, te ayudarán a completar tus tareas más rápidamente, y obtendrás más tiempo para las cosas realmente importantes.
1. Conectar con los clientes
En la actualidad, los negocios son relaciones. Nosotros compramos un coche en base a la recomendación de un amigo. Contratamos el contador con el que nuestro padre trabaja. Vamos a ver las películas de las que todo el mundo habla en Twitter. Por lo que encontrar formas de llevar las relaciones de negocio más allá de las transacciones comerciales es una forma segura de posicionarte en la mente de tus clientes.
Las redes sociales – Twitter, Facebook, LinkedIn, YouTube y similares – son todas medios para conectar con la gente. Y si puedes utilizar estas herramientas para establecer y mejorar las relaciones con tu audiencia, tienes una ventaja sobre los clientes. Aquí están algunos ejemplos:
El vendedor de autos que deja un enlace a un cupón de 20% de descuento en un cambio de aceite en el muro de Facebook de un cliente.
El asesor financiero que produce un video corto donde explica cómo hacer crecer tus inversiones.
El doctor que ofrece enlaces hacia artículos sobre cuidados de la salud a través de Twitter a sus pacientes.
Las posibilidades son tan amplias como el mundo de contenidos que se pueden compartir en internet y puedes darte cuenta de las similitudes en las ideas anteriores:
- Son relevantes. Son de aplicación directa al nicho o industria en el que te encuentras.
- Son personales. Cada interacción conecta con el público de una manera más allá de un simple “compra mis productos”
- Son útiles. Cada interacción proporciona valor para el receptor. En algunos casos, se trata de un ahorro en dinero (el cupón), y en otros, es informativo (el video y los tweets). La relación es enriquecida por tomar en cuenta los intereses del cliente en la interacción.
- Son gratis. No cuestan nada hacerlas llegar al cliente.
El tiempo invertido en ellos es relativamente bajo. Un mensaje de Twitter o Facebook toma unos segundos, el vídeo, un poco más, pero realmente ahorra tiempo en el largo plazo ya que el vendedor está contestando una pregunta recurrente de sus clientes que de cualquier forma tendría que contestar una y otra vez.
En suma, las redes sociales proporcionan formas de llegar a los clientes en un nivel íntimo, de forma rápida y económica. Las personas quieren ser tratadas como personas, no como números. Y las redes sociales proporcionan una manera de hacerlo sin tener que pasar la vida pegado en el teléfono.
2. Respuestas a las preguntas urgentes
Solía pasar que todas las respuestas a las preguntas que teníamos se podían encontrar en Google. Luego, cuando Google se convirtió en un sitio lleno de basura y anuncios, Wikipedia se convirtió en el gurú elegido. Pero incluso Wikipedia no da la respuesta a cualquier pregunta que tengamos. A veces la información es demasiado parca o a veces no quieres los hechos tal cual, quieres una opinión. Entonces, ¿qué mejor lugar para acudir que las redes sociales?
Las redes sociales son perfectas para los siguientes tipos de preguntas:
Opiniones. ¿Quieres salir el sábado por la noche y encontrar un restaurante especializado? Wikipedia no te ayudará y Google está llena de anuncios patrocinados. Así que en lugar de hacer una búsqueda infructuosa, publicas una consulta en tu página de Facebook y en pocas horas tus seguidores te han publicado una serie de sugerencias, dependiendo de tu apetito, gustos y presupuesto.
Cuando quieras una opinión o sugerencia, pregunta a tus contactos en las redes sociales. Ellos tienden a disfrutar el prestar ayuda y asistencia y la información que obtienes puede ser más apropiada para tus circunstancias que una crítica escrita por una entidad sin nombre, sin rostro.
Nuevas preguntas tecnológicas. Piensa en esta situación: tu costosa y moderna cámara de vídeo enciende después de la última carga. Te puedes pasar una o dos horas en el sitio web del fabricante, buscando las páginas de preguntas frecuentes para una respuesta. Podrías “googlear” el problema, pero todas las respuestas que dan son para modelos diferentes al tuyo. Así que envías una petición de ayuda en Twitter, y en pocos minutos tienes un puñado de sugerencias, así como el sitio para conseguir ayuda de expertos.
Google a menudo no ayuda mucho con preguntas técnicas ya que no hay suficientes respuestas de calidad para llegar a la primera página de los resultados de búsqueda o las páginas resultantes son todas sitios para enganchar, sitios no deseados o mensajes patrocinados por servicios que querrán arreglar tu cámara por un módico precio. Es por eso que a menudo te puedes ahorrar tiempo acudiendo primero a tu red.
Bibliografía y referencias. ¿Buscar un buen plomero puede ser como buscar una aguja en un pajar?. Puedes intentar con las páginas amarillas o buscar en línea, pero ¿el qué encuentres será bueno? Para estar seguro necesitas una referencia personal o conocer sus habilidades y ahí es donde la red de contactos en redes sociales pueden realmente ayudar. Publica una consulta de Facebook o Twitter, y obtendrás respuestas que te guiaran en la dirección correcta.
A menudo pensamos en las redes sociales como una manera de pasar el rato con nuestros amigos y colegas, pero en realidad es uno de los mayores ejemplos de la sabiduría de las multitudes. Disfruta de ellas y ahorrar tiempo también.
3. Obtener retroalimentación rápida
Todo sucede en línea a la velocidad de la luz. Las decisiones que solían tomar semanas o meses ahora son una cuestión de pocos minutos o segundos. No hay tiempo para un consenso de grupo o para darle vueltas al asunto. Pero con tus contactos en redes sociales, puedes tener acceso a un gran número de personas rápidamente. Hay literalmente millones de personas a la mano, listas y capaces de dar su opinión al instante.
Por ejemplo, ¿quieres saber si la fuente de tu página de inicio es demasiado pequeña? Envía un tweet con el enlace de la página y haz que el público en general te diga que opina. Te preguntas ¿qué slogan transmite mejor la esencia de tu negocio? Publica dos opciones en tu página de Facebook y haz una encuesta.
Las ventajas de recurrir a tus contactos en las redes sociales:
Puedes obtener un interesante cruce de opiniones: amigos de la secundaria, curiosos que ven la publicación y compañeros de trabajo.
Es rápido. Dependiendo del tamaño de tu red de contactos, podrías tener las respuestas en cuestión de minutos
Es gratis. No tienes que pagar un centavo para la consulta.
Es informal. No es necesario preparar un resumen de cinco párrafos, diez diapositivas de presentación en Powerpoint u otra información de fondo. Sólo pregunta y espera las respuestas.
Es objetivo. La gente a la que le preguntas tiene poco o nulo interés en el resultado de la consulta.
Por supuesto, este método es mejor para algunas consultas que otras. ¿En qué casos habría inconvenientes:
No tienes el control sobre las respuestas o de quien vienen. Podrías obtener respuestas de quienes no son tu público objetivo o que ofrecen sugerencias tontas
El solicitar opiniones puede hacer que la gente se sienta demasiado involucrada en el proceso y si no tomas sus consejos pueden sentirse menospreciados.
No puedes hacer públicos algunos proyectos internos de la empresa.
A pesar de todo esto, solicitar retroalimentación rápida a través de las redes sociales es una buena opción para las siguientes situaciones:
Cuando la decisión es relativamente menor. No sería muy recomendable hacer publica la solicitud de opiniones sobre la venta de tu negocio, o que debes responder en una demanda judicial, o sobre los problemas de servicio al cliente.
Cuando los resultados se harán públicos de todos modos y la decisión es tomada detrás de las cámaras, mantenla ahí. Los ejemplos anteriores – tamaño de una fuente, un slogan para tu negocio – son públicos de todos modos. No publiques información privada o cualquier cosa que pueda violar la confianza de tu empresa, socios o amigos.
Cuando necesitas una variedad de opiniones de diferentes personas. Si necesitas la opinión de un segmento determinado, es mejor enviar correos electrónicos directamente en lugar de poner una consulta pública para la retroalimentación.
Los contactos en las redes sociales pueden servir como tus propios grupos focales personales con tus cliente. Pedir su opinión puede hacer que se sientan más cerca de tu negocio y parte del proceso y esto es magnífico para tu relación con ellos.
4. Encuentra Recursos
Si estás en busca de un gran diseñador de páginas web, es posible que desees ignorar Google e ir directamente a Twitter. Buscar proveedores recomendados y freelancers para tu negocio puede ser tan fácil como pedir una recomendación a los cientos de personas en tus contactos de las redes sociales. He aquí un desglose de las formas de encontrar profesionales de confianza por medio de recomendaciones sociales:
LinkedIn. Uno de los elementos más poderosos de LinkedIn son las “recomendaciones”. Puedes escribir, leer y solicitar recomendaciones de otros usuarios en tu red. Puede tomar un poco de tiempo este trabajo de campo, pero se puede utilizar esta función para encontrar un gran diseñador y leer lo que otros tienen que decir acerca de él y de su trabajo.
Twitter. Mientras estás sumergido en la información disponible en LinkedIn, puedes también obtener respuestas instantáneas. Por ejemplo, twittea “Buscando una buena imprenta” y seguro obtendrás una buena cantidad de respuestas en cuestión de minutos. Da más importancia a los que provienen de tu red de conocidos, ya que a menudo una solicitud de referencias genera respuestas automatizadas a partir de un spammer. Parece que se trata de uno de sus amigos, pero en realidad es sólo un anuncio.
Facebook. Puedes enviar solicitudes de recomendaciones, al igual que en Twitter, y también puedes buscar a las personas con las palabras clave en sus perfiles. Sin embargo ten cuidado, sólo porque alguien está en la lista como “Contadora María” no quiere decir que sea una experta. También puedes enviar una solicitud para grupos de Facebook que este relacionado con el tema (por ejemplo, envía una solicitud para el diseño gráfico original de un logotipo en el muro de un grupo de diseñadores gráficos).
YouTube. Puede parecer un poco extraño poner la solicitud de algún servicio a través de un vídeo, pero ¿por qué no? Especialmente si tienes un número significativo de seguidores, se puede obtener una gran respuesta. Un beneficio añadido: si el proyecto que tienes en mente hace referencia a algo visual, puedes mostrarlo directamente en pantalla (amueblar una oficina, la revisión de tu sitio web, remodelación de la cocina).
Aunque catorce personas recomienden al mismo diseñador de páginas web, asegúrate de hacer la diligencia debida. Obtén una cotización por escrito y determina el alcance del proyecto, pide una lista de proyectos realizados y confirma que esa persona va a hacer el proyecto personalmente y no subcontratar a otra para que lo haga. Con estos consejos en mente seguro serás capaz de encontrar grandes recursos de outsourcing a la distancia de tu ratón.
5. Conecta con “expertos”
¿Alguna vez pensaste que podrías estar involucrado en una conversación con Ashton Kutcher, Shakira o Miley Cyrus? ¿Y que tal con personas expertas de tu sector? Bueno, se puede, a través de las redes sociales. Herramientas como Twitter y Facebook hacen que sea fácil conectar con las estrellas y los expertos a nivel de personal. He aquí cómo:
Mantente en tu radar. Lee su blog. Ve lo que están escribiendo. Retweetea sus tweets, comenta en su página de Facebook, y enlaza su contenido. El objetivo no es llegar a ser un acosador, sino hacerles saber que estás ahí y que tú eres más que un fanboy o fangirl.
Agrega valor. Dejar comentarios interesantes que agreguen valor al artículo de su blog. Escribe un artículo en tu propio blog y vincúlalo con el de ellos. Crea una respuesta en vídeo. Hazles saber acerca de tus experiencias y resultados con los métodos o técnicas que ellos enseñan.
Haz una pregunta. Dales un tema para que te respondan. Haz una pregunta que muestre que entiendes su tema, y que has seguido sus contenidos. No lo hagas demasiado personal, pero hazlo fuero de lo común – puede ser algo que no ha sido contestado todavía, pero que está en la mente de otros seguidores también.
No te ofendas. Con decenas y a veces cientos, miles de seguidores, lo más probable es que tu pregunta sea una de las muchas que van a recibir. Si la tuya no es respondida, no te pongas susceptible, es simplemente una cuestión de volumen, nada personal contra ti.
Aclara y repite. Mantente en la conversación. Mientras más tiempo inviertas en establecer una relación, más familiar le parecerá tu nombre. Si tu pregunta no es respondida la primera vez que la preguntes, publícala de nuevo. Intenta un par de veces, y luego sigue adelante y haz otra.
Da antes de preguntar. Si tienes la esperanza de establecer una relación con alguien de tu sector, como un posible socio de otra empresa a fin, o quieres ser invitado a colaborar en su blog o sitio web, entonces tienes más trabajo que hacer. Los líderes del mercado en diferentes nichos reciben decenas de peticiones de ayuda. Sobresal de entre la multitud haciendo algo en favor de ELLOS primero.
Hacerse notar por las estrellas de Hollywood, o de tu industria, es posible. Pero en lugar de enviar una carta de admiración por correo y esperar meses para una respuesta, bríncate las barreras y ve directamente a la fuente a través de las redes sociales. Te ahorrará tiempo, esfuerzos y momentos de frustración.
Conclusión
Como empresario, el tiempo es tu activo más valioso. Es el único recurso que no puedes mendigar, pedir prestado, robar o reemplazar. Mientras que algunas personas están pensando en las redes sociales como un distractor para perder horas y días, la gente inteligente de negocios sabe que pueden aprovechar sus redes para una variedad de propósitos relacionados con la empresa. Esperamos que esta guía te haya dado algunas ideas para ahorrar tiempo, dinero y esfuerzo.